Entrevista al Dr. José Badimón
Los inhibidores de PCSK9 representan el inicio de una nueva etapa, como sucedió con la aparición de las estatinas. Los primeros datos publicados han confirmado, como era de esperar, que una reducción del c-LDL va asociada a una reducción de eventos cardiovasculares.

Cuando se publicó el estudio IMPROVE IT aceptaron que se podían usar otros fármacos; los nuevos inhibidores de PCSK9, a la espera de los resultados de los estudios ODYSSEY OUTCOMES, pueden provocar cambios en las guías.

El estudio EBBINGHAUS, con 2.000 pacientes y un seguimiento de dos años, no ha mostrado ninguna pérdida de función cognitiva en el grupo tratado mediante inhibición de PCSK9 respecto al grupo control. Por lo tanto, parece que no existe ninguna asociación entre estos fármacos y la pérdida de la función cognitiva.

Respecto a los perfiles de pacientes en los que se considera más prioritario el uso de inhibidores de PCSK9, tanto aquellas personas que realmente no responden o no toleran las estatinas, como pacientes con hipercolesterolemia familiar constituyen el perfil idóneo para ser tratadas con estos nuevos fármacos que, a pesar de su coste, sus beneficios son mucho más marcados.

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